La mayor de Las Antillas, situada en el corazón del Caribe, encierra en sus fronteras una gran diversidad de escenarios para la recreación, el ocio y turismo, apoyada en su riqueza natural, histórica y cultural.

Cada una de las provincias que integran el territorio cubano ostenta sus características propias para la actividad turística, con ofertas dirigidas a los miles de vacacionistas que acuden cada año a los diversos destinos del país.

En la zona central de la isla destaca el territorio de Cienfuegos, con una ciudad-capital de igual nombre y que es conocida como La Perla del Sur.

Dos decenas de bibliotecas, 11 museos, más de 30 salas de cine y cinco teatros se suman a casas de cultura, galerías de arte y monumentos diversos para llevar lo mejor de las tradiciones del territorio a visitantes nacionales y extranjeros.

La edificación más emblemática del territorio es el Palacio de Valle, financiado por un acaudalado español y construido por un ingeniero italiano, y que combina en su arquitectura elementos de los estilos góticos, románico, bizantino y barroco.

Asimismo, desde 1902 tiene en sus predios al único Arco de Triunfo existente en Cuba, a lo cual se añade el Teatro Tomás Terry, uno de los tres más importantes en la isla en el siglo XIX.

La provincia también tiene su tesoro de naturaleza en el Jardín Botánico, el cual atesora una historia centenaria – fue creado en 1901 – con una colección de palmas que figura entre las diez más importantes del mundo.

Con 97 hectáreas de extensión, acoge a unas dos mil especies (de ellas el 70 por ciento exóticas), con 23 variedades de bambúes, 65 de jagüeyes y 280 de palma corcho y palma barrigona.

Los amantes del ecoturismo cuentan con uno de sus principales sitios de interés en El Nicho, al cual se llega a través de un camino que asciende por la cordillera de Guamuaya y atraviesa el valle de Yaguanabo, al sur de las Alturas de Trinidad.

Mientras, el hotel Jagua, a tres kilómetros del centro histórico de la ciudad de Cienfuegos, es considerado un lugar ideal para una confortable estancia.

La ubicación del establecimiento permite a sus huéspedes acceder con la mayor comodidad y garantía a los lugares de valor histórico-cultural que caracterizaron al siglo XIX en el territorio, entre ellos el teatro Terry y la Catedral de la Purísima Concepción.

La Perla del Sur es además plaza fuerte del turismo de eventos, con facilidades para el desarrollo de congresos, citas de negocios y reuniones de trabajo, todo ello complementado con una amplia infraestructura que incluye redes viales, aeropuerto y servicios de transporte.

La opción de playa tiene su lugar preferido en Rancho Luna, donde un hotel espera por los visitantes, unido a excelentes condiciones para la práctica del inmersionismo gracias a la impresionante riqueza de sus fondos.