La diversidad de ofertas en el panorama turístico cubano, con programas que van desde el turismo cultural hasta las modalidades de naturaleza, aventura y de salud, cuenta como pieza clave de su desarrollo las opciones de sol y playa.

Para ello, la mayor de Las Antillas se apoya en la existencia de centenares de kilómetros de costas y blancas arenas, bañadas por un mar cristalino y de temperatura agradable durante todo el año, que invita a sumergirse en sus aguas.

En el afamado balneario cubano de Varadero, en la occidental provincia de Matanzas, el hotel Mercure Coralia Cuatro Palmas constituye una opción para los miles de visitantes que cada ano acuden a disfrutar de los atractivos del lugar.

Propiedad del grupo hotelero Gran Caribe, el establecimiento se localiza en la primera línea de la playa, caracterizado con una peculiar imagen que le otorgan un signo único de elegancia y distinción entre las decenas de centros del mencionado destino turístico.

El hotel mezcla en perfecta armonía el entorno colonial de su arquitectura y decorado con la excelencia de su servicio, con opciones para todos los gustos, tal y como lo reclama el turismo en la época actual.

La presencia en su ambientación de arcadas, vitrales, columnas y balaustradas, combinadas con una abundante vegetación, permiten crear un panorama de confort urbano en un contexto típico de playa en la mayor de Las Antillas.

El Hotel Cuatro Palmas se beneficia además de los servicios que ofrece el aeropuerto internacional Juan Gualberto Gomez, a solo 25 kilómetros de distancia, lo cual facilita el acceso a la instalación para los viajeros foráneos.

En su arquitectura el establecimiento encierra 312 habitaciones, de ellas 160 dobles, siete suites, 23 cabañas y 122 bungalows, con facilidades que van desde la climatización hasta los servicios de televisión por satélite, minibar y enlaces telefónicos, entre otros.

Además de una excelente zona de playa, ideal para quienes prefieren un refrescante baño en las cálidas y azules aguas del mar, están las ofertas que brindan los bares Las Olas y Coralia, unido a la diversidad gastronómica de los restaurantes Las Palmas y El Ranchón.

La administración del centro por el grupo francés Accor le otorga además algunas de las características de las diversas denominaciones que opera, vinculadas a la ubicación de las instalaciones hoteleras en sitios legendarios, en perfecta armonía con las tradiciones y materiales constructivos de la localidad.

Una amplia gama de oportunidades convierten a Accor en un grupo multimarcas, con establecimientos que funcionan bajo la cobertura de Novotel y Sofitel, así como Mercure, Ibis, Motel 6, Red Roof Inn, Parthenon, Coralia y Suitehotel.

A decir de los especialistas, la presencia de diferentes marcas responde a la estrategia de cubrir varios segmentos del mercado, con ofertas específicas en cada caso, acordes con las exigencias de los clientes.