La capital de la mayor de Las Antillas, con una historia de mas de cinco siglos, encierra en su centro numerosos exponentes que recuerdan las distintas épocas transcurridas desde su fundación y reflejadas en su arquitectura.

El núcleo urbano, mezcla de estilos constructivos que abarcan el renacentismo, art deco, mudéjar, barroco, neoclasicismo, eclecticismo, art nouveau y el barroco cubano, es también plaza fuerte de la cultura nacional.

Para muchos visitantes, el centro histórico de La Habana encierra un interés particular, al disponer de instalaciones recreativas y hospedajes con características similares a las de establecimientos similares que existieron en tiempos anteriores.

Entre esa infraestructura, con una amplia red de hoteles y hostales gestionados por la compañía HABAGUANEX S.A., esta el llamado Mesón de la Flota, que recuerda en su ambientación las costumbres marineras de la isla.

Por su naturaleza de puerto, La Habana fue dada siempre al tránsito marítimo proveniente de los mas diversos lugares, cuna de la flota de galeones que tras concentrarse en la ciudad cada año trasladaba las riquezas de América hacia la colonia.

En ese entorno, el Mesón de la Flota abre sus puertas a los vacacionistas, en recuerdo a la peculiar actividad comercial que se desarrolló en el país caribeño, con una localización que lo beneficia al encontrarse en las cercanías de la bahía y de la Plaza Vieja.

El establecimiento dispone de cinco confortables habitaciones, equipadas con todas las facilidades que reclama el ocio en la época actual, además de beneficiarse de una ubicación privilegiada gracias a la proximidad con museos e instalaciones emblemáticas de la ciudad.

La oferta de la instalación se complementa con un restaurante de igual nombre, ubicado en la planta y que evoca las tradicionales tabernas españolas de la colonia.

La ambientación esta en estrecha relación con el mar, en una mezcla donde se incluyen símbolos de la marinería, pequeñas réplicas de navíos antiguos y banderas del código marítimo de señales, entre otros atractivos.

Los usuarios que escojan el sitio están en condiciones degustar de un amplio surtido de vinos de diferentes países y de una selección de exquisitas tapas españolas, además de poder escoger entre diferentes entrantes fríos y calientes, platos fuertes con guarniciones al gusto y postres criollos y españoles.

También se distingue por la actuación en vivo de diferentes grupos de la música flamenca que amenizan con cantos y bailes la estancia del visitante, al mejor estilo de ese genero de la cultura foránea.

Entre los platos que sirven de sello al lugar esta el conocido como "langosta borracha con frutas del Caribe", el cual se elabora a base del exquisito crustáceo -también conocido como la Reina del Caribe- mantequilla, cebolla y ají, además de incorporársele jugo de naranja, piña y fruta bomba cortadas en dados.

Para los amantes del turismo de ciudad, el Mesón de la Flota recuerda la posición que tuvo Cuba como llave del Golfo en la época de la colonia, con un ambiente marinero alegórico a esa etapa de la sociedad de la isla.